Máximo Kirchner, líder de La Cámpora, buscó ubicarse en el centro de la escena en el acto “Armar de nuevo, Kirchner en Atenas”.
En busca de mayor protagonismo, Máximo Kirchner encabezó un acto en el microestadio de Atenas, de La Plata. El líder de La Cámpora se metió en la interna peronista y dejó claros mensajes a sus rivales dentro de la contienda.
Faltando menos de dos meses para las elecciones del PJ nacional, Máximo se presentó ante la militancia camporista bajo el lema: “Armar de nuevo, Kirchner en Atenas”, en un intento de mostrarse como continuador del legado de sus padres ante el vacío de liderazgo dentro del peronismo.
Acompañando el acto, estaban los intendentes Marano Cascallares (Almirante Brown) ayra Mendoza (Quilmes), Mariel Fernández (Moreno), Federico Achaval (pilar) Federico Susbielles (Bahía Blanca), Juan Mancini (Suipacha) y Fernando Raitelli (Brandsen).
En su discurso, Máximo Kirchner hizo claras referencias a la interna peronista. “No puede ser que alguien piense que nosotros queremos obstaculizar a alguien con todo lo que elaboramos”, señaló. Y buscó enmarcar los límites en los que debería desarrollarse la discusión dentro del espacio: “El debate sí, boludeces no. Hechos concretos”.
Además, no dudo en tirar palos para la vereda de enfrente dentro de la interna. “Lamentablemente, hubo personas que dudaban si tenía que ser Scioli o Wado. A ustedes les parece, miren dónde está el compañero, miren dónde está Scioli, y nos vienen a pedir autocrítica a nosotros. Autocrítica hagan ustedes”, apuntó Máximo Kirchner.
También hizo duras críticas a Milei y el rumbo económico: “Si nuestro pueblo tiene hambre y se llevan nuestros gastos, nuestro petróleo, la minería, el oro y la plata, es saqueo”.
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