La causa por presuntas coimas en la Agencia Nacional de Discapacidad (ANDIS) sumó un nuevo capítulo, el consultor Fernando Cerimedo (referente clave de la campaña presidencial de Javier Milei) declaró como testigo en Comodoro Py y confirmó que Diego Spagnuolo, extitular del organismo, le habló de un circuito de corrupción que incluía nombres ya bajo investigación judicial. Entre ellos, señaló al funcionario presidencial Eduardo Lule Menem.
La causa investiga una presunta red de cohecho vinculada a la compra de medicamentos a través de contratos millonarios con la droguería Suizo Argentina, principal proveedora del programa Incluir Salud. Según la denuncia, los pagos habrían afectado directamente fondos públicos, y los hechos podrían encuadrarse en delitos como cohecho, administración fraudulenta, negociaciones incompatibles e infracción a la ley de Ética Pública, en el contexto de una posible asociación ilícita.
Durante su declaración, que duró poco más de una hora efectiva, Cerimedo confirmó que Spagnuolo le había hablado “con las mismas expresiones” que luego se conocieron en los audios filtrados, los cuales dieron origen a la causa. Según fuentes judiciales, ratificó que el exfuncionario le mencionó directamente a Lule Menem, en el mismo sentido en que se lo escucha en las grabaciones.
“Confirmó que le habló de un esquema de corrupción. Sostuvo que lo que se escucha en los audios, son cosas que en otras charlas le dijo a él”, explicaron fuentes cercanas a la investigación.
Consultado por el fiscal Franco Picardi sobre otros nombres, el consultor detalló que Spagnuolo le contó que le habían “puesto a alguien” en la agencia, en referencia a Daniel Garbellini, entonces segundo en la ANDIS y exdirector de Acceso a los Servicios de Salud. Garbellini está mencionado en los audios y ya fue allanado por orden judicial. Su teléfono fue secuestrado y está siendo analizado por el equipo fiscal.
También fueron mencionados en la testimonial Pablo Atchabahian, actual subsecretario de Administración del Ministerio de Capital Humano, y una supuesta vinculación frecuente de Spagnuolo con la casa de la hermana de la vicepresidenta Victoria Villarruel.
En cambio, Cerimedo negó que Spagnuolo le hubiera hablado de Karina Milei, actual secretaria General de la Presidencia. Según su entorno, el exfuncionario “sabía que Karina es muy cercana a Cerimedo y por eso no la mencionó, porque entendía que él la iba a defender”.
Sobre la empresa Suizo Argentina, el consultor declaró que Spagnuolo hablaba de “la Suizo“, pero no mencionó directamente a sus dueños, los hermanos Kovalivker. La empresa recibió contratos por $55.000 millones para la provisión de medicamentos, y la Justicia investiga si las adjudicaciones fueron legales o si hubo licitaciones direccionadas y con sobreprecios.
Cabe recordar que la fue impulsada por una denuncia que también apunta, entre otros, contra el presidente Javier Milei, su hermana Karina Milei, Lule Menem y Eduardo Kovalivker, dueño de la droguería.
En este escenario, la situación judicial de Spagnuolo se agravó. No solo por el testimonio de Cerimedo, sino porque sus propios abogados, Juan Araoz de Lamadrid e Ignacio Rada Shultze, renunciaron a su defensa, lo que obliga al exfuncionario a designar nuevos representantes legales.
En paralelo, fuentes del expediente confirmaron que Spagnuolo evalúa convertirse en imputado colaborador, una figura que le permitiría negociar una mejora procesal a cambio de aportar datos de relevancia sobre la causa, apuntando a funcionarios de mayor jerarquía.
La investigación sigue bajo secreto de sumario por decisión del juez Sebastián Casanello, aunque esa medida dentro de una semana. Será un momento clave: las defensas podrán acceder a la prueba y el fiscal Picardi definirá si imputa formalmente al exdirector de la .
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