En medio de la tensión cambiaria y una brecha que no afloja, varias billeteras digitales suspendieron este martes la operatoria de compra de dólar oficial, que cotizaba alrededor de un 7,5% por debajo del dólar financiero. La decisión, que tomó por sorpresa a los usuarios, dejó en evidencia la fragilidad del esquema en momentos de alta demanda y escasa información sobre las regulaciones del mercado de cambios.
El caso más resonó fue el de Cocos Capital, una fintech local que se posicionó en el último tiempo como una alternativa para el acceso al mercado cambiario minorista. Su fundador, Ariel Sbdar, no se excusó ante las quejas de los usuarios y en su cuenta de X (exTwitter), se sinceró. “Nos pidieron apagar”, escribió sin más detalles, disparando todo tipo de especulaciones.
Otra plataforma que se vio afectada fue Mercado Pago, que hasta hoy ofrecía la compra de dólar oficial mediante un acuerdo con el Banco Industrial (BIND). Ni la fintech ni la entidad bancaria ofrecieron explicaciones públicas al cierre de esta edición.
Ante la incertidumbre, desde el Banco Central salieron a marcar la cancha: “La compra–venta de dólares está regulada por el BCRA y solo puede realizarse a través de entidades autorizadas”, remarcaron fuentes oficiales. Además, agregaron: “No está permitido tercerizar operaciones del oficial. Las ALyC pueden vender MEP o CCL sin restricciones”.
En ese sentido, Ualá aclaró que su servicio no se vio afectado porque no comercializa dólar oficial, sino dólar MEP a través de su propia ALyC, Ualintec Capital. “De momento, solo ofrecemos la posibilidad de comprar y vender Dólar MEP más rápido… ahora podés comprar de manera instantánea”, comunicaron desde la empresa.
No es la primera vez que una jornada caliente deja plataformas fuera de juego. Hace apenas dos semanas, en plena escalada del tipo de cambio, Banco Galicia registró “inconvenientes técnicos” que paralizaron su homebanking y app durante más de siete horas.
La “tercerización” de operaciones con era una maniobra que el volvió a prohibir la semana pasada. La “restricción cruzada” que impide operar en el oficial y en los mercados financieros fue una normativa que volvió a implantar la autoridad monetaria para evitar el rulo que permitía comprar en el minorista y vender en el MEP para provechar el spread entre ambos segmentos de dólar, con el objetivo de evitar la una canilla de sangría de divisas.
Mientras tanto, el dólar sigue marcando el pulso de la agenda económica, las limitaciones operativas (y la falta de información clara) vuelven a generar ruido en un mercado que ya de por sí viene nervioso.
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