El Frente Renovador de la Concordia, liderado por Carlos Rovira, se impuso en las elecciones en Misiones con el 28,4% de los votos. Con el 91,5% de las mesas escrutadas, el oficialismo superó por casi 8 puntos a La Libertad Avanza (LLA), que con un 21,8% debutó en los comicios provinciales como segunda fuerza, de la mano del extenista Diego Hartfield.
En conjunto, los espacios libertarios sumaron el 45,2% de los sufragios, superando al oficialismo provincial. La tercera fuerza más votada fue el Frente por la Vida y los Valores, que llevaba como candidato a Ramón Amarilla, detenido desde septiembre por una causa de sedición y que, insólitamente, alcanzó el 19,17%.
La participación en las elecciones en Misiones apenas superó el 57% del padrón, convirtiéndose en la elección con menor concurrencia en Misiones desde el regreso de la democracia. La caída en la asistencia generó preocupación y evidenció el descontento ciudadano, especialmente entre empleados públicos, uno de los sectores más afectados por la crisis económica.
En el búnker del Frente Renovador celebraron la victoria con discursos de Rovira, el gobernador Hugo Passalacqua y otros referentes del oficialismo. El líder renovador defendió la incorporación de candidatos con perfil liberal, y reafirmó el proyecto de unidad provincial: “Tenemos jóvenes con pensamiento liberal, peronista, radical, independiente. Esto no lo van a encontrar en ningún otro lugar del país”.
Del otro lado, los libertarios atribuyeron los resultados ajustados en estas elecciones en Misiones a irregularidades en la carga de datos y aseguraron que sus números internos mostraban una paridad mayor con el oficialismo. “Nos enfrentamos a una estructura que gobierna hace más de veinte años”, señaló Diego Hartfield, cabeza de lista de LLA, quien contó con el respaldo explícito de Karina Milei, Martín Menem y Patricia Bullrich.
Cabe destacar que las elecciones en Misiones estuvieron marcadas por controversias: intentos de impugnación, decisiones judiciales controvertidas y demoras inusuales en la publicación de resultados oficiales. Incluso se intentó excluir del padrón a unos 25 mil miembros de las fuerzas de seguridad, medida que finalmente fue revertida tras la presión de distintos sectores, incluido el propio oficialismo.
El radicalismo, dividido y debilitado, quedó relegado al sexto lugar en las elecciones en Misiones de este año, con apenas el 5% de los votos, marcando un retroceso significativo frente al 25,8% logrado cuatro años atrás bajo el sello de Juntos por el Cambio.
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