La Justicia avanza con el peritaje de celulares y computadoras propiedad de la jueza Julieta Makintach por el juicio por la muerte de Diego Maradona.
La jueza Julieta Makintach fue removida del cargo en el juicio por la muerte de Maradona, pero la causa que investiga la realización del documental Justicia Divina tuvo un avance clave en las últimas horas: la Justicia ordenó la apertura y análisis de los celulares incautados a tres de los protagonistas del escándalo. Se trata de un paso crucial que podría definir imputaciones y establecer responsabilidades concretas en una causa que ya comprometió gravemente la transparencia del proceso judicial.
El procedimiento fue realizado este martes por la División de Tecnologías de la Policía de la Ciudad, bajo la supervisión de los fiscales Patricio Amallo, Claudio Chaieb y Cosme Asprella. Los dispositivos peritados pertenecen a María Lía Vidal, amiga de la infancia de la jueza Makintach; José Arnal, productor del polémico documental; y Jorge H., el camarógrafo que grabó en secreto la primera jornada del juicio en San Isidro.
Avanza la investigación a la jueza Makintach que comprometió el juicio por la muerte de Maradona
Los cuatro teléfonos celulares marca Iphone y las tres notebooks que se están peritando habían sido secuestrados el 22 de mayo, pero recién ahora la Justicia autorizó su apertura para realizar una extracción forense con el sistema UFED, que permite acceder a mensajes, audios, videos, fotos, llamadas y contactos. El análisis de ese material podría demorar hasta diez días, aunque los fiscales ya cuentan con pruebas previas que complican el panorama de los involucrados.
El único presente al momento del peritaje fue Jorge H., quien desde el inicio de la causa se mostró colaborativo, entregó el material grabado y declaró como testigo. En cambio, ni Vidal ni Arnal se hicieron presentes. Este último, sin embargo, ya había presentado un escrito explicando su participación en el proyecto, lo que terminó por comprometer aún más la situación de la jueza Makintach.
El trasfondo de esta investigación tiene derivas casi cinematográficas: mientras presidía el juicio por la muerte del ídolo, la jueza Makintach estaba inmersa en la creación de un documental que la siguiera. La maniobra fue descubierta cuando se detectó la presencia de cámaras no autorizadas durante las audiencias. A partir de allí, se supo que el proyecto tenía nombre, guion, tráiler y hasta título registrado.
El nombre del documental, Justicia Divina, fue inscripto formalmente el 22 de abril por Vidal y Juan D’Emilio, quienes también se habían infiltrado en las audiencias alegando supuestos intereses personales. Ese mismo día, tras la audiencia número 12, presentaron un sobre con el guion, el detalle del proyecto y un tráiler promocional. Todos esos documentos fueron hallados más tarde durante los allanamientos.
Además, se comprobó que la tasa para registrar el título fue pagada en febrero, lo que confirma que el proyecto de grabar un documental sobre el juicio por la muerte de Maradona estaba en marcha desde mucho antes de su formalización. Esa línea temporal coincide con lo que había declarado José Arnal: que le presentaron la idea a principios de ese mes.
La jueza Makintach fue removida de su rol
La jueza Makintach fue apartada del caso tras estallar el escándalo, y el juicio por la muerte de Maradona deberá volver a empezar, con un nuevo tribunal y un proceso limpio de interferencias externas. Sin embargo, la Justicia ahora apunta a determinar si la magistrada conocía o no la existencia del documental, ya que en su declaración Makintach sostuvo públicamente que no sabía de su existencia.
Con la pericia de los celulares en marcha, el expediente podría entrar en una nueva etapa. La expectativa está puesta en si de estos dispositivos surgen pruebas que permitan avanzar con las primeras imputaciones formales. Mientras tanto, el caso sigue sumando tensión, en el marco de uno de los juicios más delicados y mediáticos que recuerde el fuero penal bonaerense.
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